lunes, 18 de abril de 2011

La Maquina Humana


Después de seis meses en la estequiometria de las soluciones, derivando funciones, deduciendo limites indeterminado,  creando  congruencias y analizando proporciones. Pude dar un paso mas en la escala científica de mi vida, un paso aunque insignificante en magnitud, posee gran contenido. Un paso que me permitió crear un sentido y vista totalmente objetivo de la vida y pienso que no  solo yo eh sufrido este cambio.

Ahora como el titulo de este fragmento de ideas lo dice “La maquina humana”, que en toda la expresión de la palabra es perfecta, una maquina muy compleja, en la cual podemos encontrar un mundo fascinante y que cada rama de la ciencia lo define a su manera. Creando así la esencia de las mimas.
A continuación diferentes puntos de vista en las ramas científicas:

Donde un doctor ve un cuerpo, un químico ve masa, un matemático un objeto y un físico magnitud.

Donde un químico ve una solución, un doctor ver sangre, un físico volumen y un mecánico fluidos.

Donde un físico ve una fuerza de aceleración cinética, un doctor ve un corazón y un químico un punto de ignición.

Donde un mecánico ve una carrocería, un químico ve una estructura atómica y un doctor ve los huesos.

Y así podemos pasearnos por esta maquina humana desde estos 4 puntos de vistas científicos.

La objetivada de nuestras vidas depende del modo en que la veamos.
                                                                                                              Juan urdaneta
By Juan Carlos Urdaneta Portillo 

miércoles, 13 de abril de 2011

Esa Mujer

Esa, que la fantasía esmeralda hace que la belleza de sus ojos sea incomparable. 

Pequeña, pero su grandeza es indescriptible.

Esa, que en color azabache de su piel encierra el misterio de su belleza. 

La que vive entre la anatomía y la biología humana.

Esa, La de la morfología perfecta.

Que su locura la define, como la gran mujer que es.

Esa, que tiene la verdad en su forma de ser.

La de los sentimientos a flor de piel.

Esa, que es como un libro abierto, estoy tratando de leer. 

Ella aunque creció, su niña interna no la ha abandonado.

Esa, que en su compañía el tiempo se detiene para disfrutar de cada segundo a su lado.

La que lleva un corcel indoblame en su personalidad.

Esa, que lleva la magnanimidad muy dentro de su ser.

Esa que su nombre todavia no daré a conocer.

Ella es esa mujer que espero nunca dejar de ver.

By Juan Carlos Urdaneta Portillo